miércoles, mayo 06, 2015

Ridiculeces y otros cariños

Si, ya sé te hablo a ti y les hablo a todas.


Yo Nena, Yo Princesa, Yo Hermosa

Me preguntaba si no hay motes o nuevas ideas para llamar a las novias o galanas en turno que para todo tenemos que repetir invariablemente cada que se cambia de galana.

En un principio todo es miel sobre hojuelas y los cariñitos parecen divinos y hermosos, con el paso de los años las cosas ves que son una tendencia y le llamarás del mismo modo a más de una..bendita aquella que solo ha tenido que repetir los cariños dos veces o una!!..quisiera conocerla!. (Se busca)

Así que levante la mano y tire la primer piedra quien no ha utilizado más de una vez los siguientes motes para llamar a su galana, novia, esposa, date, business...etc. Así como los nombres y/o apellidos más comunes entre el gremio existen los motes y otras ridiculeces  que nunca pueden faltar:

1. Bebé (y todas sus variantes: baby, bb..etc.etc)
2. Chiquita /Chikita
3. Nena
4. Princesa
5. Hermosa
6. Gorda
7. Flaca
8. Muñeca
9. Cariño
10. Osito (este sobrepasa mis límites)
11. Mostro (jaja si es una ridiculez que dije yo)
12. Preciosa (uff)
13. Cosita (y sus variantes: cosa, cosi) no mm
14. Pequeña (oh si!!)
15. Corazón
16. Amor
17. Borreguito y otros animalitos que no entiendo
...


En fin... diría mi amiga la tia...cero creatividad a la hora de apodar a nuestra galana en turno, quizá sea para no errar en el nombre, o simplemente, nuestra manera ridícula de expresar mil cosas, como sea...no conozco a nadie que no haya usado más de una vez estos y otros motes que me faltan.

3 comentarios:

  1. Mi cielo era mi favorito <3

    ResponderBorrar
  2. 18.Chocho, un clásico. Además, de cielo y de princesas poco... Es mucho más inclusivo y nada hipócrita.
    Luego podemos tornar a lunáticas o brujas, pero nunca dejaremos de ser el número 18.

    ResponderBorrar
  3. Anónimo9:58 p.m.

    Me decía BB ahora medio lo odio o lo anhelo jaja, he usado el princesa y mi vida o mí amor nada creativa lo se ��

    ResponderBorrar

¡Buga la que no comente!